Ante la eventual ocurrencia de incendios forestales, la Secretaría Regional Ministerial de Salud del Biobío, realizó este martes 09 de enero, una inspección técnica al relleno sanitario CEMARC, ubicado en la ruta Concepción – Penco, a objeto de verificar la normativa vigente para disposición final de residuos domiciliarios o asimilables, además de reforzar las medidas de prevención y control ante siniestros.

La fiscalización en la región se extiende también a los rellenos Laguna Verde, Arauco – Curanilahue, Vertedero Mulchén, Vertedero Cañete e Hidronor.

“Tanto en el relleno sanitario CEMARC como en el resto de los establecimientos operativos en la región,  a través de nuestra Unidad de Gestión Ambiental, verificamos mensualmente el cumplimiento del Reglamento sobre condiciones sanitarias y de seguridad básica para este tipo de recintos, así como la implementación de planes de emergencia contra incendios, que considera cercos corta fuego y otras medidas de prevención y control, como cobertura diaria de residuos mediante la aplicación de un material que contribuye a la minimización de gases combustibles y la operación óptima de los sistemas de captación de gases para evitar fugas de gas metano, por su carácter inflamable”, declaró el Seremi de Salud del Biobío, Dr. Eduardo Barra Jofré.

Otros ámbitos que son objeto de fiscalización por parte de la SEREMI de Salud corresponden a solicitudes de ampliación de capacidad disponible, implementación de protocolos frente a disposición de aves por gripe aviar, normativas de salud ocupacional, reporte mensual de residuos recepcionados por comuna, implementación de planes de invierno y medidas adoptadas frente a emergencias por lluvias, ejecución de planes de cierre, entre otros.

Programa anual de fiscalización

Durante el presente año se han realizado 45 fiscalizaciones a rellenos sanitarios y 11 a vertederos, además de otras 3 inspecciones a plantas de transferencia de residuos urbanos.

El proceso de control ha dado origen a 4 sumarios, por incumplimientos en la fase de operación, fundamentalmente asociados a derrame y olores.

El año 2022 también se evidenciaron 4 sumarios sanitarios a este tipo de establecimientos.

Hay que recordar que los sumarios corresponden a investigaciones que pueden finalizar en absolución, amonestación, multas pecuniarias (hasta 1.000 Unidades  Tributarias Mensuales de acuerdo al Código Sanitario), prohibiciones de funcionamiento (temporales) o clausura (definitiva).